Préstamos para estudiantes
Estamos ante un tipo de financiación diseñada para que los estudiantes puedan cubrir los costes de su educación superior.
La capacidad económica puede marcar la diferencia entre obtener un título universitario, un master o posgrado, una segunda especialización… o quedarse fuera, ya que a veces los recursos financieros necesarios pueden ser insuficientes para algunos. Por eso se permite pedir préstamos especiales a los estudiantes, o a sus padres en algunos casos.
El poder adquisitivo de las familias
Una gran ventaja de los préstamos para estudiantes que es necesaria aclarar: pedir préstamos estudiantiles es independiente del patrimonio que se posea. Sí, de hecho, tener una renta baja puede influir en la elegibilidad y en las condiciones, sobre todo en el caso de los préstamos públicos.
Y tampoco es por fuerza obligatorio tener un expediente académico excepcional o ser «un alumno de sobresalientes». A diferencia de las becas, que sí se centran en el historial académico, los préstamos estudiantiles no suelen tener ese tipo de requisitos.
Están pensados para que sean una ayuda en la educación superior, y claro, pueden variar según el tipo. Sí es cierto que existen algunos productos específicos con requisitos concretos, como los destinados a estudios de posgrado o ciertas especializaciones.
Si se tienen dudas sobre ello, es interesante consultarlo en el Ministerio de Educación. Aunque en Rial podemos ayudarte a conocer todos los detalles y conseguir el mejor préstamo de estudiantes para ti.
Somos tu mejor consejero para financiar tus estudios
Porque tener dudas acerca de préstamos para estudiantes universitarios es comprensible. Se trata de algo específico, que requiere unos conocimientos concretos y en lo que perderse puede ser fácil.
Cuando pasa esto y todo se vuelve confuso, lo más acertado es contar con una empresa de asesoría financiera. Te ayudamos a tomar decisiones alineadas con tus objetivos y necesidades. Los gestores financieros somos profesionales capacitados para evaluar las circunstancias financieras de sus clientes.
Y no solo eso, cualquier sugerencia que se haga, todos los consejos serán siempre contigo de trasfondo: tus propias necesidades, tus problemas y con las miras puestas en encontrar lo que mejor se adapte a tu situación económica.
Principales ventajas y desventajas de los préstamos para estudios superiores
Ventajas de pedir un préstamo de estudiantes
- Acceso a la educación superior: es una de las más significativas (a veces es difícil hasta cubrir los costos de matrícula). Si bien tener estudios superiores se ha convertido en un primer objetivo para muchos estudiantes, el mercado laboral también exige mayor preparación y especialización, por lo que poder optar por un préstamo para obtener esa preparación es una gran ayuda para muchos casos.
- Flexibilidad de uso: matrícula, libros, alojamiento, gastos de manutención, etc.
- Plazos de pago amplios: lo que significa que las cuotas mensuales son más bajas y manejables.
- Tasas de interés bajas: sobre todo en los préstamos gubernamentales, aunque existen otras opciones muy interesantes que podremos estudiar para tu caso en concreto.
Desventajas a tener en cuenta
- Generación de deuda: la más evidente, lo que puede resultar en una carga financiera significativa, incluso varios años después de que se termine. La flexibilidad de estos préstamos hacen más llevadero el pago de la deuda.
- Devolución: junto con los intereses acumulados; son una obligación financiera (incluso si uno se enfrenta a dificultades económicas o si le cuesta encontrar empleo después de graduarse).
- Complejidad: No es un préstamo típico como para comprar un coche o para viajar. Si quieres conseguir las mejores condiciones para un préstamo de estudios, conocer al detalle todas las implicaciones y saber a ciencia cierta las posibilidades que tienes para devolver la deuda, es muy recomendable consultarlo con un asesor financiero.
Financiar estudios universitarios y superiores, toda una decisión
La financiación de los estudios universitarios, posgrados, masters, etc.; puede ser una preocupación importante para las familias que tienen más de un miembro en edad universitaria. El sistema educativo usa las becas como una forma de aliviar esta carga financiera. Pero es cierto que a veces los requisitos pueden resultar complicados y no todos pueden optar a dichas becas de estudiantes, o no siempre es suficiente.
La elección entre acudir al Ministerio de Educación o a un banco depende sobre todo de dos aspectos, la situación financiera y la capacidad para cumplir con los requisitos y responsabilidades de cada opción. En muchos casos, explorar ambas alternativas es el camino: las becas pueden ser una fuente importante de financiación; los préstamos estudiantiles pueden dar apoyo complementario, si es necesario. Y en otros casos, los préstamos para estudios superiores y sus condiciones especiales son la única opción para financiar una carrera, un master, etc.
Por eso es muy aconsejable hablar con un asesor financiero. Obtener orientación específica sobre un tema complejo como este, es esencial para solicitar un préstamo de estudios de manera responsable.
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Preguntas frecuentes
¿Son altas o bajas las tasas de interés?
Suelen ser moderadas, en general; más aún si las comparas con otras formas de financiación.
¿Tienen los préstamos para estudios algún requisito de méritos?
No. A diferencia de las becas (que a menudo requieren que el historial académico sea, cuanto menos, destacado), no suelen tener estos requisitos.
¿Se puede solicitar si cuando vaya a pedirlo se habrá concluido el periodo de estudio?
Si, porque existe un tiempo, digamos, de prórroga. Y es que tras la graduación hay un período de gracia.
¿Puedo optar a becas si he solicitado algún préstamo de este tipo?
Si; son independientes. Se pueden solicitar y recibir tanto becas como préstamos, siempre y cuando se cumpla con los requisitos específicos de cada caso.
¿Qué figura es más habitual entre los bancos y las entidades que ofrecen productos para estudiantes, el crédito o el préstamo?
Es más común encontrar préstamos en lugar de créditos.
¿Hay que tener firmado algún contrato laboral o de beca para que concedan uno?
No es necesario. Los préstamos estudiantiles están diseñados para ayudar a los estudiantes a financiar sus estudios (valga la redundancia), y por lo general, no están vinculados a un contrato de trabajo.
¿Existe algún límite de edad?
Se fija como «edad tope» la mayoría de edad. Esto significa que, por lo general, hay que ser mayor de 18 años para solicitarlo.
Aún así, en algunos casos un menor de edad puede acceder, si cuenta con un tutor legal o un representante legal, como un padre o tutor, que asuma la responsabilidad.
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